En México continúan desaparecidos dos laboyanos

Arley Alfonso González y Jorge Leonardo Espinosa

La incertidumbre de las familias de Jorge Leonardo Espinosa Pérez, y su amigo Arley Alfonso González, desaparecidos en territorio mexicano desde el pasado 8 de octubre, se hace más fuerte al no tener noticias sobre su paradero.

 

En las últimas horas circularon versiones sobre el hallazgo de dos cuerpos en una vía de la localidad de San José de Los Ríos, Estado de Guasabe Sonora, que se presume sean de los dos colombianos, naturales de la ciudad de Pitalito, pero su familia guardó prudencia y señaló que se atienen a las recomendaciones que les han dado las autoridades mexicanas, de esperar a la total identidad que se estaría dando el día de hoy miércoles.

“No es cierto que los hayan identificado como lo afirmaron ayer medios de prensa en el Huila, lo que sucede es que el pasado 19 de octubre fueron encontrados dos cuerpos sin vida en una vía de San José de los Ríos y presumen que se trate de mi hijo Jorge Leonardo y de su amigo Arley Alfonso, pero hasta el momento no hay nada concreto”, dijo al señora Martha Lucía Pérez, madre de uno de los desaparecidos.



Martha Rocío Pérez, madre de Jorge Leonardo Espinosa

 Aceptó hablar con este noticiero, una vez tuviera mayores detalles sobre lo que se estaba afirmando. Más tarde, sostuvo que no hay certeza de que los cuerpos que encontraron hace 15 días y que se hallan en la morgue sean los de su hijo y del amigo de este.

Señaló que desde este medio le pide a la Embajada de Colombia en México, al Consulado en Obregón, y a la cancillería, colaborarles en la agilización de la identificación esos cuerpos para saber si son los de su familia o se descarta esa posibilidad.

Entre tanto, Marcela Zuluaga, esposa de Arley Alfonso González, pidió colaboración para que se establezca con precisión lo que se está diciendo, y de ser así, sean repatriados los cuerpos de los dos colombianos para darles cristiana sepultura en la ciudad de Pitalito.


Marcela Zuluaga, esposa de Arley Alfonso González

 “Sabemos de los trámites que se deben hacer, pedimos que nos colaboren para traerlos si se trata de ellos, si nos toca hacer una teletón, vamos a pedirle la colaboración a la ciudadanía de Pitalito, para pagar los gastos porque no tenemos el dinero que nos dicen cuesta repatriarlos” dijo Marcela Zuluaga.

Arley Alfonso González, era un vendedor de mercancías en la ciudad de Pitalito, tiene 27 años de edad, está casado con Marcela Zuluaga, de cuya unión tienen una niña de 7 años.

Viajó hace año y medio a México luego de sacar todos los documentos requeridos y al parecer se enganchó como promotor de ventas de seguros. Regresó a Pitalito y hace tres meses volvió a viajar a territorio mexicano.

Jorge Leonardo Espinosa Pérez, es un deportista de 21 años de edad, compitió en motociclismo en varias pruebas locales y regionales, ganó varias de ellas y sus trofeos son exhibidos en la sala de la casa de sus padres en el barrio Madelena.


Uno de los trofeos ganados por Jorge Leonardo Espinosa en competencias de motociclismo

 Igualmente tramitó la documentación y viajó a México hace 14 meses. Aunque no tenía dinero, le estaba yendo bien, dice su señora madre, estaba ahorrando para venir nuevamente en diciembre a pasar las navidades con su familia y amigos. Estuvo para el San Pedro al igual que su amigo en Pitalito.

Los dos laboyanos viajaban a bordo de una camioneta de su propiedad de Obregón Estado Sonora, a la ciudad de Tepic en el Estado de Nayarit, el día 8 de octubre, fecha en la que se comunicaron con sus familias y hablaron del viaje que estaban haciendo para reunirse con unos amigos de Pitalito en esa ciudad.

Esa tarde desaparecieron y sus familias fueron enteradas el día 9 de octubre, cuando de inmediato se dieron a la tarea de denunciar y buscar ayuda para tratar de localizarlos.

El día 17 de octubre, la policía halló los cadáveres destrozados de dos hombres sin identificar en una vía de la región de San José de Los Ríos, Estado de Guasabe Sonora.

Fueron enviadas cargas dentales a Colombia para tratar de verificar su identidad, pero estás no corresponden a sus características. Se habla del hallazgo de un anillo, pero igualmente su familia no da crédito, porque puede haber sido hurtado.

Los dos laboyanos andaban con sus documentos al día, y en los cuerpos hallados no hay ningún reporte sobre documentos de identidad.

Lo que las dos familias en Pitalito no se explican, es cómo luego de 15 días de localizados dos cuerpos, no los hayan identificado.